Este miércoles 15 de octubre, festividad de Santa Teresa de Jesús, el nuevo obispo de Ciudad Real, mons. Abilio Martínez Varea, ha concedido su primera entrevista en un medio de comunicación de la provincia, emitida por COPE Ciudad Real y conducida por José Manuel Fernández Almazán.
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El obispo, que tomó posesión de la diócesis el pasado 27 de septiembre, explicó que estas primeras semanas las está dedicando a conocer la realidad diocesana. «Llevo tres semanas escasas en la diócesis y me he encontrado con la gente, los sacerdotes y las juntas parroquiales que quieren conocerme», dijo, pero «necesitamos un poquito de tiempo, que vayan pasando los días, para poder afrontar la diversa realidad de la diócesis de Ciudad Real y, sobre todo, conocerla».
Preguntado por sus objetivos, monseñor Martínez Varea ha dicho: «La diócesis con la que sueño es una diócesis en la que los cristianos vivamos realmente comprometidos tanto en la Iglesia, en la transmisión de la fe, como en el mundo. La transformación de la realidad, es decir, una Iglesia que sea una Iglesia viva, que vayamos pasando de un cristianismo sociológico, de un cristianismo que hemos heredado pero que no lo interiorizamos, a un cristianismo personalizado».
Entre los principales retos ha mencionado la familia, la pastoral vocacional y la presencia de los jóvenes en la Iglesia. «Para que los jóvenes se enganchen hay que ofrecer el mensaje del Evangelio tal cual. No hay que tener nunca la tentación de rebajar el mensaje para que haya más gente en la Iglesia», ha afirmado.
En cuanto al papel de la Iglesia en la sociedad actual, el obispo destaca que «tiene que ser un papel de serenar la sociedad y de serenar los problemas, para que en vez de buscar la confrontación haya siempre un diálogo y un acuerdo».
Finalmente, ha agradecido la acogida recibida en la provincia: «Lo que más me está gustando es ese carácter afable y abierto de la gente […] la amabilidad de las personas que me saludan y me paran en la calle».